Intelectuales y Académicos

Cómo Bush utilizó el 9/11 para rediseñar el mundo

Autor: Tariq Ali

Fecha: 9/8/2003

Traductor: Victoria Rouge- especial para PI

Fuente: Conter pounch

Una entrevista con Tariq Ali

Pregunta: Después del ataque del 11 de septiembre y de sus consecuencias en los EE.UU. y en Oriente Medio, ¿Cree Ud. que el mundo esté enfrentando ahora un estado de guerra? ¿Por qué (o por qué no)?

Tariq Ali: Pienso que hay una guerra en Afganistán. Cada semana hay informes de víctimas. Ya se han matado a casi 2000 civiles afganos, generalmente por ‘accidente’. ¿Quién los lamenta? ¿Quién hace monumentos en su honor? ¿Quién se preocupa por sus familias?

Simultáneamente está la guerra de Sharon en contra de la nación palestina, respaldada por la administración Bush. Los medios americanos son más parciales que la prensa israelí. Tratan a Israel como la víctima. Ignoran el hecho de que Israel provocó los ataques suicidas mediante una política sistemática de asesinato a los líderes palestinos. La ‘Operación Escudo Defensivo’ está diseñada para aplastar la resistencia palestina y destruir todas las esperanzas de una república palestina soberana e independiente.. Dejando de lado la abominación moral que es esto y los dobles estándares del Occidente, preguntémonos si tales acciones llevarán a un descenso o a un aumento de los actos de terrorismo. Cualquiera que sea capaz de tener un pensamiento independiente sabe la respuesta a esto.

Pregunta: Junto con Noam Chomsky, Ud. es uno de los escritores de habla inglesa que critica más duramente las políticas del gobierno de los EE.UU., particularmente en materia de seguridad. En su opinión, ¿Cómo ve la oposición (por la que nos referimos a la izquierda, no especialmente en los EE.UU. sino en el Primer Mundo) a la administración Bush?

Tariq Ali: Pienso que la izquierda, utilizando la palabra en su sentido más amplio, está dividida. Muchos intelectuales estaban aterrorizados al apoyar la ‘guerra contra el terrorismo’. Aunque en Estados Unidos existe una fuerte minoría que se opone al nuevo imperialismo. En Europa hay una mayoría en Alemania, Gran Bretaña e Italia que se opone a una nueva guerra en Irak y muchos ahora empiezan a ver que EE.UU. utilizó al 11/9 para rediseñar el mundo, entonces hay una oposición en el Primer Mundo. Actualmente en Gran Bretaña 170 miembros del parlamento (principalmente de los laboristas) han firmado una declaración pública en contra de la guerra en Irak.

Por supuesto que aquellos que comprometieron su apoyo a la guerra de Bush en Afganistán –los belligeratti—están también a favor de una guerra contra Irak. Su guru favorito es el ex-trotskista Kanaan Makiva – el escritor anglo-iraquí nombrado por los aduladores como el ‘Allexander Solzhenitsyn de Irak’ – quiere a sus camaradas en el Departamento de Estado norteamericano para tomar posesión de Irak y gobernarlo.

Pregunta: Hace unos meses, Ud. estuvo en la Bienal del Libro de San Pablo para hablar de la edición brasilera de su último libro, El Choque de Fundamentalismos. ¿Tiene noción de cómo está reaccionando los pueblos en los países Latinoamericanos ante este no-tan-nuevo Orden Mundial – especialmente Brasil, cuyo actual gobierno es considerado uno de los más leales seguidores del neoliberalismo?

Tariq Ali: Mi impresión es que toda América Latina es profundamente hostil al Nuevo Orden. América del Sur siempre ha sido tratada por EE.UU. como una ‘esfera de co-prosperidad’, por ejemplo, al ser explotada desvergonzadamente y bajo una permanente semi-ocupación. Así que la oposición a Washington en esta región no es una sorpresa. Miren Argentina. Un resultado trágico de la economía neoliberal. Este país era el laboratorio de fundamentalismo del mercado. Los mullahs del FMI siguieron cada giro. El tesoro de los Estado Unidos autorizó sus políticas. ¿El resultado? Un desastre total.

Esto es lo que el PT de Brasil tendría que estar explicándole a su pueblo. Las políticas de Cardoso podrían llevar al mismo desastre en Brasil. Sé perfectamente bien que las opciones de Lula son restringidas, pero si no hace nada, el resultado será una tragedia. La combinación de un colapso económico y la despolitización de las masas es el peor escenario posible. Así que el PT tiene que implementar algunas reformas radicales, especialmente con relación a salud, educación y los campesinos sin tierras.

Pregunta: En algunas de las entrevistas que Ud. dio después del 11 de septiembre dijo que no le temía al gobierno de los Estados Unidos, sino que le temía a los fundamentalistas. Todos saben, sin embrago, que el actual “enemigo del mundo libre” ha trabajado para la CIA y el Pentágono, y sus rasgos religiosos eran acentuados para atacar y destruir. ¿Puede el fundamentalismo ser usado en ambos bandos de esta guerra, y hasta qué punto?

Tariq Ali: Creo que Ud. debe haber entendido mal alguna entrevista. Siempre he postulado, y esta es la tesis de mi libro, que el imperio estadounidense y sus políticas económico-militares son la madre de todos los fundamentalismos. Han engendrado a los grupos que ahora combaten.

Pregunta: ¿Qué podemos esperar de los conflictos entre los judíos y los palestinos en un futuro próximo? ¿Es pesimista sobre este asunto? ¿Es por eso que Ud. pone en su libro esa excelente entrevista con Isaac Deutscher, a propósito?

Tariq Ali: No soy optimista. Cómo podría serlo cuando un criminal de guerra como Sharon habla a los senadores estadounidenses de una guerra de cien años contra los árabes y de la necesidad urgente de transplantar a un millón más de judíos en Israel. Esta farsa no puede durar mucho más tiempo (aún ni los sionistas pueden superar las leyes de la biología) pero quiere transmitir un legado a la generaciones siguientes: guerra, guerra y más guerra. Pero los palestinos no van abandonar su lucha por la nacionalidad. Desde 1948, todos los intentos de aplastarlos, de borrar su memoria han fallado.

Los acuerdos de Oslo crearon ilusiones. Los palestinos los rechazaron. No van a aceptar un Estado Palestino que sea un protectorado israelí. Así que hasta que los Estados Unidos obliguen a Israel a aceptar una solución de dos estados, nada cambiará demasiado.

Pregunta: En su libro Imperio, Antonio Negri y Michael Hardt no consideraban exactamente a los Estados Unidos como el imperio mismo, sino como una mera representación de éste. ¿Tenían razón?

Tariq Ali: IMPERIO es una descripción estimulante de la globalización, pero está indefectiblemente equivocado en dos asuntos centrales. Los estados fuertes todavía existen --- Estados Unidos, China, Alemania, etc. ---- pero la diferencia con el pasado es que ahora hay un solo Imperio y éste no es la entidad nebulosa imaginada por los estudios culturales, sino un organismo real, viviente y que tiene un nombre: los Estados Unidos de América..

Pregunta: Suponiendo que se equivocaban en este punto: ¿podemos vivir sin el imperio norteamericano? ¿Viviremos sin él algún día?

Tariq Ali: Que nosotros vivamos sin él es poco probable, pero espero que nuestros hijos y su hijos sí. Todos los imperios sufren de un complejo de invencibilidad, pero cuando llega el fin vemos que era impredecible y sorprende a todos. En el caso el los EE.UU. probablemente será una combinación de factores internos y externos, económicos y militares.


Esta entrevista con Tariq Ali fue dirigida por Fábio Fernandes de Mão Única, la revista brasilera.